lunes, 26 de marzo de 2012

La L que se fue a B.

Podría hablar del 27, echarle la culpa, repetir otra entrada en la que lo crucifico, pero no lo voy a hacer. Me acuerdo del día en que dijiste: "escribes de todos pero bla bla bla". ¿Qué iba a decir que no supieses? Todo en su determinado momento. Y el momento es este, cuando escribo sobre la despedida que me niego a tener. Por eso no es una carta, es una entrada donde doy las gracias. Una entrada para que me subas las visitas cuando no estés por aquí y creas que he dejado un mensaje secreto entre estas líneas.

Una más de mis cuervos. Volando lejos, pero sobretodo alto, como solo ellos saben hacer. Una persona que se hace pasar por loca para que no se note que yo nunca he estado cuerdo. Para que no se fijen en mi locura, para que mi mundo no parezca tan jodido, para que tenga una vida en la que meterme mientras van pasando vidas que quieran arreglar la mía. Una persona así merece todo mi respeto.

-Cuídate.


Y me quedo corto.


domingo, 25 de marzo de 2012

How to Skateboarding Not Kill Yourself.


La velocidad no es velocidad si no puedes sentirla. Las ruedas se deslizan por el asfalto, chirrían, tocan su particular melodía. Un cruce, otro cruce, una rotonda. No hay razón para parar ahora, ni motivo por el que disminuir la marcha. Sacas el pie de la tabla y acaricias el asfalto con la suela, quieres más. Nada te persigue pero tú huyes. No tienes nada, pero estás dejando todo atrás solo porque puedes. Subes a la acera de un Ollie, y te entremezclas con la gente, eres un gas noble, no interactúas, solo te deslizas junto a ellos. Y entonces unas escaleras, un reto, un obstáculo, justo igual que cuando la vida te dificulta las cosas, solo que aquí tienes el control y eso lo hace tremendamente más divertido. La madera choca con el suelo y te elevas, bajo tus pies se dibuja un kickflip, bajo el kickflip los 6 escalones te miran burlonamente y sin pronunciar palabra dicen "No pasarás", planchas el truco, sonríes, vuelves a colocarte la capucha y sigues sin mirar atrás. Te encantaría controlar todo como controlas esto. No solo esquivar los problemas sino hacerlo con tanta elegancia como lo haces sobre la tabla. Por eso la quieres tanto, cuando estás encima se te hace difícil pensar que pueda existir algo más. Cuando las ruedas empiezan a girar, la cabeza deja de funcionar, los fantasmas no son capaces de alcanzarte y se piensa mejor a cierta velocidad.Concretamente a esta velocidad con el mundo callado bajo el sonido de la música que llevas en los cascos. No pares, no dejes que nada te alcance, no dejes de flotar, de deslizarte, ollie tras ollie, flip tras flip y por lo que más quieras cuando caigas, levántate. Ya no recuerdo si iba a escribir sobre Skate o sobre la vida, tampoco recuerdo cuando empezó a significar lo mismo.


miércoles, 21 de marzo de 2012

Then out with the lights

En días como hoy, y en fechas como las que se acercan, uno no puede evitar escuchar una canción que es muy buena y acordarse de gente que ya no está. Podría pensar "Hey ¿Y si esta es una de las mejores canciones jamás escritas y él no está para escucharla? Seguro que le hubiese gustado". Podría pensar "es tan bueno este tema que hay un poquito de él en ella". Podría pensar que si reúno todas las canciones buenas que llevan un trozo de él haga un "él entero". Podría pensar tantas cosas, pero solamente voy a dejar que suene.


Las personas y las heridas tienen mucho en común, pueden desaparecer, pero te acuerdas de ellas cada vez que tocas la cicatriz.

domingo, 18 de marzo de 2012

Saliendo de la pecera.

Todos sabemos que a veces la vida es como nadar en un mar de mierda. En ese mar que nos toca vivir, nos han hecho creer que para vivir plenamente necesitamos muchas cosas y para conseguir esas cosas nos es esencial el dinero. Dinero que irremediablemente tendremos que conseguir trabajando. Por tanto dejamos de vivir para empezar a trabajar y deslizarnos en la ilusión de que cada cosa que consigues te acerca más al momento en el que empiezas a vivir de verdad.

Hasta hoy he dejado que me llevase la corriente acatando esas reglas de oro solo para poder conseguir el ticket de salida. Una jornada de mierda en un trabajo de mierda, con unos compañeros a los que odio, en un cubículo diminuto. Un pez incapaz de olvidar dentro de una pecera flotando en un océano que apesta.
Pero no más, años de vivir modestamente y trabajar mucho han hecho que pueda conseguirme un barco, un tambaleante continente diminuto con el que poder empezar a vivir y deshacerme de la ilusión de que vivo, poder ir a contracorriente, sin necesidad de nadar, de luchar cada día para tener un día más para luchar.

Este barco es un trozo de tierra propio. Tiene unas leyes distintas, una jurisdicción totalmente diferente a la que se lleva en mar o en tierra. Este barco es mi túnel de escape, arrancar el motor y dejar atrás el mundo, nada me podría apetecer más. Siempre podría haber seguido trabajando hasta conseguir un cohete espacial, asegurándome no tener que echar cuentas nunca más con la humanidad, pero creedme que os digo que con un barco me conformo. Amigos, compañeros, después de hoy, no vayáis tras Nemo, este pez toma conciencia de que el acuario no es su sitio, de que siempre fui un iceberg, que tenía mucho más escondido bajo el nivel del mar que en la superficie. Es por eso que emprendo un viaje para descubrirlo y si creyera en Dios os diría que de alguna manera esto es una revelación, que fue él quien me dijo "consigue un Arca y sal de ese agujero antes de que se hunda".



domingo, 11 de marzo de 2012

Pulsa espacio para continuar.




Bienvenidos al silencio infinito y al frío inmutable. Bienvenidos a su vez, al calor apubullante y al brillo que no cesa. Bienvenidos a esa nebulosa donde nacen o mueren las estrellas, estáis entrando en Hollywood, estáis entrando en mi pequeño universo de penas y glorias.

No voy a presentarme porque creo que me he presentado demasiadas veces en mi vida, voy a separaros directamente el grano de la paja. Nunca debí venir aquí, salir de Nueva York, escapar de mi pequeño mundo de pequeños relatos y silenciosos logros. El caso es que aunque no debiera lo hice, a alguien le gustó que escribiera sobre lo gracioso que es adorar a un Dios que nos odia, a alguien se le ocurrió que sería buena idea escribir un guión de cine sobre ello, a alguien se le antojo cambiar mi vida, y a mí me pareció bien.

Me equivoqué, estaba a años luz de comprender que esta ciudad te cambia totalmente, que hay planetas que es mejor no visitar. Que aunque pensase que no hay vida inteligente en mi pequeño mundo, no era razón suficiente para pensar que sí la había fuera. Llegar a Los Ángeles fue totalmente un Big Bang, el comienzo de una cuenta atrás que me ha llevado hasta hoy. Los Ángeles, bonito nombre para un lugar que no te da salvación alguna, en todo caso, me ha condenado. Claramente, no todo fue arder en los fuegos de mi infierno personal. He sido grande, grandísimo, una supernova, he brillado con la potencia de mil soles. De mirar de niño al cielo y preguntarme que había allí arriba a ser mi propia constelación, a mirar cara a cara a este lugar, maraña de rostros famosos y de talentos que no dejan de brillar formando esta maldita nebulosa, a perder el gas, a consumirme poco a poco con la misma energía que me ha hecho brillar.

Cuando llegué aquí todo eran estrellas, fiestas, todo era una galaxia detrás de otra galaxia. Estábamos en lo más alto, te miraban como si fueras verdaderamente un cuerpo celeste, te hacían fotos, escribían sobre ti. Después de años de escribir sobre todo, escribían ahora sobre mí, es de locos... Estaba tan arriba que al mirar abajo veías otro cielo, un cielo de flashes, de ojos brillando en la oscuridad y de sonrisas perfectas. Sonrisas que no tardaron en torcerse cuando se le acabó la gasolina al cohete de mis ideas. Qué duro es darte cuenta de que no eres un Sol, que eres una estrella fugaz. Mientras pasas todos se quedan admirándote, pero la notoriedad de una estrella fugaz dura poco, nada gira en torno a ti como te creías, pero ahí arriba todo se ve tan distinto. Las distancias también son distintas, es muy fácil perderte a ti mismo aquí arriba, sin gravedad, orbitando alrededor de todos los pecados que se ponen en tu trayectoria. Vives necesitando un buen telescopio para poder seguir la estela de tu ego, aún con todo este brillo todo se volvió tan oscuro.

Maldita sea, si cuando morimos vamos al cielo, ¿a dónde van las estrellas cuando mueren? Me lo pregunto mucho últimamente, creo que me he perdido del todo, que este lugar lejos de ser el principio de algo se ha convertido en un agujero negro, un retrete galáctico que ha ido succionando mis ideas, dejándome sin nada, porque un escritor sin ideas no es nadie, no se merece un hueco en el lienzo de Dios. Y eso es lo que me queda ahora, esperar a que el agujero negro en el que esta ciudad se ha convertido acabe absorbiendo todo mi mundo, la poca cordura que me queda y con suerte deje el universo completamente en blanco.






lunes, 5 de marzo de 2012

Publicidad descarada.


Bueno Damas y caballeras en http://www.paperfront.es hay mentes del mundo Twitter que maravillan con su forma de escribir, sus opiniones, sus críticas, su mundo interior. Si queréis leer lo que tienen en su cabeza, entrad.

Y como yo soy pequeño y quepo en todos sitios, me he colado y también podréis ver algunas cosas mías, hoy "Roto": http://www.paperfront.es/opinion/journal/roto/

domingo, 4 de marzo de 2012

A petición.

Bueno, Damos y Caballeras, quiero informar que para darle vidilla al blog y a mis neuronas, se nos ha ocurrido a Omar Deschain y a mí que estaría bien escribir a petición. Recogeremos vuestras peticiones vía Twitter o vía blog. Puede ser un tema, unas palabras, una frase, un tema musical, cualquier cosa, elegiremos una, y los dos escribiremos sobre la misma y veremos el resultado de dos puntos de vista enfocándose en un mismo tema. Espero que disfrutéis de la idea, que os animéis a proponer cosas y a leer, incluso a escribir si queréis y me lo dejáis por aquí. Muy pronto el primer relato.


Un saludo cohenuros!

Tu peor enemigo.


Dicen que es libre. Dicen que está curado. Cómo a un hombre de ciencia como yo puede costarle tanto creer que la medicina moderna puede curar la locura. Lo he visto miles de veces, es un camino de un solo sentido, una transformación irreversible, un proceso degenerativo. No solo lo he visto, para perseguir a tipos como él, he tenido que seguir sus pasos y pisar por donde pisa. No puedes mirar a los ojos a la demencia sin que te devuelva la mirada. Y este es el punto importante, el Joker no solo ha mirado a los ojos a la locura, ha bailado con ella, la ha hecho suya, no puede vivir en libertad porque tiene mucho por lo que pagar aún.

Principios, los principios que me marqué me han impedido acabar con los problemas, convertirme en una sombra no ha funcionado, ser un guardián silencioso no da resultados. Principios, estoy cansado de tanto principio, estoy buscando el final, busco la redención. ¿Cuánto me he empezado a parecer a las personas con las que lucho?¿cuánto descendí que me es imposible ascender de nuevo? Esta noche es la noche, voy a averiguar si soy capaz de terminar lo empezado, si soy capaz de acabar con los monstruos que he creado. Después de tanto tiempo en esta guerra, solo queda él, y su risa, esa risa que me persigue.

Sigo al Joker hasta un apartamento de los suburbios, sin guardaespaldas, sin matones, sin nadie en casa, cualquiera diría que es posible que haya cambiado. Lo noto nervioso, quizás sabe que lo sigo, es imposible que me haya visto, si no supiese que no tiene, diría que los remordimientos no lo dejan vivir en paz.
Lo espero en el baño, mientras él se hace la cena en una cocina cochambrosa. Me tiemblan las manos, no me veo capaz de hacerlo. Entra al baño, echa una meada, se mira al espejo y entonces me ve, no dice nada, solo sonríe, está temblando como yo, me mira a los ojos, y clava la mirada un poco más adentro, está dentro de mi cabeza, puedo escuchar su risa, se ríe porque sabe que todo está terminando, todavía no era totalmente libre, no se puede ser libre si te falta una mitad. Frente a frente, somos uno, abre el armario del baño y toma un bote de pastillas, sigue sonriendo y yo puedo oír más alto su risa, no voy a detenerlo, quiero que esto acabe, que la locura pare, que el telón baje entre risas.


A primera hora de la mañana hay un equipo forense en un apartamento de los suburbios, han pedido que venga al piso la Dra. Queen, uno de sus pacientes más antiguos y puesto en libertad hacía solo una semana yacía muerto en el baño. La doctora no podía explicárselo, después de años de terapia estos últimos meses parecía totalmente curado y ahora está sobre las baldosas del baño cubierto de maquillaje de payaso y una capa anudada al cuello. Una escena de lo más retorcida. Intenta explicarle al equipo forense la historia médica de este paciente tan peculiar. Siendo solo un niño vió morir a sus padres, se obsesionó tanto que creó una personalidad que fuese capaz de encontrar al asesino, poniéndole así nombre a su miedo, Batman. La dificultad de ser un joven queriendo cazar a alguien que no encontraba le llevó también a crear al monstruo, a facilitarle la tarea, creando al culpable surgió el payaso, la risa nerviosa, la culpa, la expresión más auténtica de su locura. La doctora puede sentir el peso del fracaso, está viendo años de esfuerzo y de lucha inertes en el suelo. Aún recuerda que en sus últimos momentos de lucidez, cuando el Joker no la acosaba como un tipo perverso y autodestructivo, y cuando Batman no lo atormentaba desde las sombras, llegó a querer curarse, realmente quería dejar de ser un duo tan difícil de llevar, recuerda las veces que en las sesiones repetía "No puedo seguir poniendo a mal tiempo dos caras".